martes, 25 de agosto de 2009

CÁNCER POR ASBESTO

TOMADO DE LA PAGINA DE BBCMUNDO, EL 25 DE AGOSTO.
El cáncer por asbesto al descubierto
BBC Ciencia



Científicos británicos afirman que desarrollaron una prueba más precisa para detectar el mesotelioma, el cáncer vinculado a la exposición al asbesto.


A pesar de estar prohibido, muchos países en desarrollo siguen usando asbesto.
Esta enfermedad, que ataca las células de la pleura -la membrana que recubre los pulmones- se desarrolla mucho tiempo después de la exposición al material.

Y para cuando se detecta los pacientes a menudo tienen una corta expectativa de vida.

La nueva prueba, desarrollada por investigadores de la Universidad de Oxford, analiza los niveles de una proteína vinculada al cáncer en el líquido que rodea a los pulmones.

Según los expertos, la investigación -publicada en American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine (Revista Estadounidense de Medicina Respiratoria y de Cuidado Intensivo)- ayudará a los médicos a diagnosticar con más precisión la causa de anormalidades en los pulmones.


Construcción maligna

El mesotelioma es un cáncer muy difícil de tratar debido a su ubicación y a que el tumor no parece responder bien a la quimioterapia.

La enfermedad puede atacar a personas que no tienen antecedentes de exposición al absesto, pero en general, se sabe que el principal factor de riesgo es la inhalación del polvo que libera el mineral.

Hace varias décadas solía usarse asbesto en materiales para construcción y otros productos, por eso los más afectados suelen ser los trabajadores de la construcción como albañiles, plomeros y electricistas.

La acumulación de líquido en la cavidad pleural -el derrame pleural- puede ser extremadamente difícil de diagnosticar porque existe una gran variedad de causas benignas y malignas
Dra. Helen Davies

En los países desarrollados se han establecido regulaciones que prohíben la exposición al asbesto y la producción de materiales con el mineral.

Pero en muchas otras naciones no existen estas restricciones.

Y debido a que el desarrollo de mesotelioma puede tardar muchas décadas, los expertos creen que el número de casos podría aumentar en los próximos años.

Diagnóstico difícil
"La acumulación de líquido en la cavidad pleural puede ser extremadamente difícil de diagnosticar porque existe una gran variedad de causas benignas y malignas" afirma la doctora Helen David, del Centro de Medicina Respiratoria de la Universidad de Oxford, quien dirigió la investigación.

"Pero una de estas causas es el mesotelioma pleural maligno, y aunque es un cáncer relativamente raro su incidencia está aumentando rápidamente a nivel global" agrega.

Hasta ahora la prueba estándar para detectar mesotelioma en pacientes con derrame pleural es el examen citológico del líquido pleural, pero éste no es muy preciso.

La doctora Davies y su equipo, buscando formas de distinguir el mesotelioma como causa del derrame pleural, se centraron en la mesotelina, una proteína que se encuentra en niveles altos en el líquido pleural de la mayoría de los pacientes con la enfermedad.

Los investigadores analizaron muestras de líquido pleural de más 200 pacientes que habían sido referidos a una clínica especializada en enfermedades respiratorias.


La prueba mide el nivel de una proteína en el líquido pleural.

Descubrieron que los niveles de la proteína eran casi seis veces más altos en los pacientes con mesotelioma que en los pacientes con cáncer pulmonar secundario y 10 veces más altos que en aquellos cuyas causas detrás del mal eran benignas.

Prueba rápida
Según la doctora Davies "este estudio presenta una forma de identificar más rápidamente y desde el inicio los casos de mesotelioma".

"Debido a que el mesotelioma tiene un tiempo promedio de supervivencia de 12 meses, minimizar el número de procedimientos invasivos y pruebas que los pacientes necesitan es vital para reducir la mortalidad y el tiempo que deben pasar en el hospital".

La investigadora agrega que "un diagnóstico temprano también permite una intervención más rápida para aliviar los síntomas, así como iniciar otros tratamientos como quimioterapia o radioterapia".

"Y también se puede instar al paciente a buscar compensación por su condición una vez que se confirme el diagnóstico" dice Helen Davies.

Según la Organización Mundial de la Salud, unas 90.000 personas mueren cada año a causa de enfermedades relacionadas con la exposición al asbesto.

Y 43.000 de estas muertes son a causa de mesotelioma maligno.